miércoles, 11 de octubre de 2006

Un buen momento para la investigación sobre Eficacia Escolar en Iberoamérica

En 2001, hace ahora cinco años, trece investigadores de otros tantos países de Iberoamérica elaboraron un ”Estado del Arte” de la Investigación sobre Eficacia Escolar en sus respectivos países (Murillo, 2003). Aunque con ese estudio se visualizó la existencia de una razonable cantidad de trabajos de una buena calidad sobre Eficacia Escolar desarrollados en la Región, también puso en evidencia las grandes carencias que sobre el tema se estaban dando en esos momentos. Así, hace cinco años la situación se podía caracterizar por:
  • Una difusión muy escasa de los estudios desarrollados. Una gran parte de ellos eran tesis doctorales o informes inéditos, o libros con una muy limitada difusión tanto en el país de origen como más allá de las fronteras nacionales.
  • Un muy bajo impacto de los resultados encontrados en la investigación, de tal forma que salvo contadas excepciones, los trabajos apenas habían servido de base para la toma de decisiones o para la elaboración de otras investigaciones sobre el tema.
  • Una imagen negativa de la investigación sobre Eficacia Escolar entre docentes e investigadores; imagen generada en gran medida por la confusión existente entre los trabajos de la línea de carácter economicista denominada Productividad Escolar, preocupada fundamentalmente por la optimización de los recursos, con la línea de Eficacia Escolar, de carácter absolutamente pedagógico y centrada en conocer los factores de proceso que hacen que una escuela sea de calidad, para ayudar a su mejora.
  • Aislamiento y desconocimiento mutuo de los investigadores sobre Eficacia Escolar. De tal forma que cada equipo era una isla dentro de su país.
  • Nulo reconocimiento internacional de los trabajos realizados en Iberoamérica. Y como muestra de esta afirmación sirva un ejemplo: en el International Handbook on School Effectiveness Research (Teddlie y Reynolds, 2000), a pesar de su explícita intención de recoger lo que se hacía sobre esta línea en todo el mundo, no aparecía ni una referencia sobre trabajos desarrollados en Iberoamérica.
Ahora, cinco años después de la elaboración de ese estado del arte, la situación parece haber cambiado de forma radical. Para comenzar y como elemento más destacado, el número de investigaciones y la calidad de las mismas se han incrementado de forma notable. De hecho, es posible defender que la mayoría de las mejores investigaciones sobre Eficacia Escolar en la Región se han desarrollado en este último lustro.

Pero también se han dado otra serie de elementos fundamentales para el desarrollo de esta línea de investigación en la Región. Así, hay que señalar que en la actualidad existe una sólida y cohesionada comunidad de investigadores sobre Eficacia Escolar. La Red Iberoamericana de Investigación sobre Cambio y Eficacia Escolar (RINACE), con sus casi 400 miembros agrupa a la práctica totalidad de estudiosos sobre esta temática. Las actividades que desarrolla ayuda al mutuo conocimiento y abre las puertas para el desarrollo de mejores investigaciones.

También, se empiezan a vislumbrar impactos directos y explícitos de la línea de investigación en las políticas educativas de los diferentes países. Y dos ejemplos vamos a utilizar para ilustrar esta afirmación: por una parte el Programa Escuelas de Calidad impulsado por la Secretaría de Educación Pública de México y, por otro, el Marco para la Buena Enseñanza y el Marco para la Buena Dirección, desarrollados por el Ministerio de Educación Nacional de Chile. Ambas iniciativas recogen de forma clara los resultados de la investigación sobre Eficacia Escolar y los interpretan desarrollando acciones con un claro impacto para la mejora de la educación de su país.

Otro elemento destacable es la existencia de un canal propio de difusión de los trabajos realizados sobre Eficacia Escolar: la Revista Electrónica Iberoamericana sobre Calidad, Eficacia y Cambio en Educación (REICE). En sus cuatro años existencia ha publicado un buen número de aportaciones de calidad sobre el tema. Este mismo número de REICE presenta tres interesantes artículos sobre la temática de una alta calidad.

Quizá lo más llamativo en estos cinco años transcurridos esté siendo el interés internacional que están comenzando a despertar los trabajos desarrollados en Iberoamérica sobre Eficacia Escolar. Así, unas líneas atrás, habíamos utilizado como muestra de la situación en el 2000 la inexistencia de referencias de los trabajos desarrollados en Iberoamérica en el Manual Internacional de Investigación sobre Eficacia Escolar. En la nueva edición, que se encuentra en imprenta, se le dedica un capítulo íntegro a la investigación sobre Eficacia Escolar en América Latina.

El futuro inmediato se presenta, además, muy prometedor. De entrada, la más ambiciosa  investigación sobre esta temática desarrollada nunca en la Región, la llamada Investigación Iberoamericana de Eficacia Escolar, en poco tiempo estará acabada y publicada. En segundo término, estamos esperando que el Convenio Andrés Bello publique un volumen que recoja quince de las mejores investigaciones desarrolladas en Iberoamérica sobre el tema: quince investigaciones que podríamos denominar como clásicas; y, por último, el Laboratorio Latinoamericano de Evaluación de la Calidad de la Educación está desarrollando el Segundo Estudio de Factores Asociados, un interesante trabajo de Eficacia Escolar con un fuerte impacto en la región.

Es importante reconocer el gran avance realizado, y felicitarse por ello. Sin embargo, cualquier tipo de autocomplacencia está fuera de todo lugar. Cuanto más sabemos más descubrimos lo que nos queda por saber; cuanto más se consigue más nos damos cuanta de lo que nos falta por hacer. Los sistemas educativos de Iberoamérica necesitas incrementar de forma radical sus niveles de calidad y equidad. Y mientras esto sea así, no podemos más que seguir trabajando.

La investigación sobre Eficacia Escolar realizada desde Iberoamérica y con investigadores Iberoamericanos puede y debe aportar valiosísimas informaciones que ayuden a tomar decisiones en el aula, la escuela y el sistema educativo que contribuyan a conseguir una escuela de calidad para todos. Una escuela de calidad para todos que haga una sociedad más justa, equitativa y fraternal.

Referencias

Murillo, F.J. (Coord.) (2003). La investigación sobre Eficacia Escolar en Iberoamérica. Revisión 
internacional del estado del arte. Bogotá: Convenio Andrés Bello.

Teddlie, C. y Reynolds, D. (Eds.). (2000). International Handbook of School Effectiveness Research. Londres: Falmer Press.

Referencia Original

Murillo, F. J. (2006). Un buen momento para la Investigación sobre Eficacia escolar en Iberoamérica. REICE. Revista Iberoamericana sobre Calidad, Eficacia y Cambio en Educación, 4(3).

domingo, 1 de octubre de 2006

Dirección Escolar, Factor de Eficacia y de Cambio

La Red Iberoamericana de Investigación sobre Cambio y Eficacia Escolar (RINACE) nació con el compromiso ineludible de colaborar en la transformación de las escuelas para que incrementen sus niveles de calidad y de equidad. Y la estrategia utilizada para conseguirlo es la investigación: desarrollando, fomentando y difundiendo investigación de calidad que ayude a la toma de decisiones dirigida a ese necesario cambio escolar. 

Sin desdeñar un ápice todos los esfuerzos realizados, hay tres características que creemos que debe tener la investigación que realmente consigue impactar en la mejora de la Educación. 

En primer lugar, ha de ser una investigación de calidad. De esta forma, más allá de defender la prevalencia de un enfoque metodológico sobre otro, las características fundamentales que ha de tener la investigación es que esté bien fundamentada, desarrollada metodológicamente de forma rigurosa, con un buen análisis de las informaciones obtenidas y reflejadas mediante informes de calidad, entre otros elementos. De esta forma, el primer deber de todo investigador o investigadora que quiera realmente cambiar la educación es hacer bien su trabajo. 

En segundo lugar, creemos que los investigadores e investigadoras han estar comprometidos con el cambio. No cabe duda de que no hay investigación neutra: qué se investigue, cómo se haga, con quién y para quién se realice, cómo y a quién se difundan los resultados son decisiones profundamente marcadas por la ideología. En función de qué sociedad, que hombre y mujer y qué educación y qué escuela queremos así será nuestro trabajo. Sólo si la investigación busca de forma deliberada, mejorar la escuela, podrá aportar algo para lograrlo. 

Por último, defendemos que algunos temas tienen un mayor impacto que otros en la consecución de unas mejores escuelas. De nuevo sin minusvalorar cualquier esfuerzo, parece evidente que abordar unos problemas de investigación va a tener un impacto más directo sobre la transformación escolar que otros. 

Y en ese último sentido, la investigación sobre dirección escolar resulta clave: detrás de una buena escuela siempre hay una persona que la lidera ejerciendo funciones de dirección; y no es posible el cambio de la escuela sin contar con el apoyo y compromiso del director o directora. Por lo tanto, si abordamos la temática de la dirección escolar y su incidencia en al cambio y la mejora, estamos contribuyendo a elaborar un modelo de dirección que contribuya a transformar la escuela; estamos, sin duda, realizando una aportación significativa. De ahí la elección de la temática de este número.

No se nos escapa que detrás del título elegido para este monográfico se encuentra una de las tensiones dialécticas que configuran el día a día de la dirección escolar. Efectivamente, la persona que ejerce las tareas de dirección, por una parte, ha de ser muy conservadora, dado que tiene como una de sus principales tareas, mantener, apoyar y reforzar aquellos elementos, actividades y actitudes que funcionan en la escuela. Y de forma simultánea, ha de ser el máximo revolucionario del centro escolar, dado que una de las misiones inherentes a su cargo es transformar la escuela para incrementar sus niveles de calidad y equidad. Tensión dialéctica que ha de avanzar, indudablemente, en una radical transformación del modelo de dirección imperante.

Referencia Original

Murillo, F. J. (2006), Dirección Escolar, Factor de Eficacia y de Cambio. REICE. REvista Iberoamericana sobre Calidad, Edicacia y Cambio en Educación, 4(4), 1-3.

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